Gran polémica y crítica ha levantado en las redes sociales la forma en que la mascota de los Olmecas de Tabasco, Pochichoco, llegó al estadio Ángel “Cuco” Toledo de Macuspana, durante la ceremonia previa al arranque del primer partido de playoff ante los Tigres de Quintana Roo.
Elementos de la Secretaría de Marina desplegaron una bandera monumental mexicana sobre el terreno de juego. Acto seguido, un helicóptero de la Marina llevó al estadio a Pochichoco, quien llevaba la pelota para el lanzamiento de la primera bola.
La aeronave aterrizó dentro del campo de béisbol, de donde descendió Pochichoco, acompañado de dos mujeres elementos de la Semar, para dirigirse al centro del diamante y entregar la pelota al zurdo Cecilio Ruiz, quien hizo el primer lanzamiento.
Algunos de los comentarios en redes sociales señalaron el peligro que representa aterrizar la nave en un área donde hay cinco mil personas. En otro se expresa: “¿Cuánto le cuesta al pueblo de México mover un helicóptero de la Semar? ¿El vehículo aéreo no debería estar asignada a tareas diferentes a transportar una mascota de un equipo de béisbol?”