Los cubanos aprobaron el nuevo Código de las Familias en un referendo que abre las puertas al matrimonio igualitario, la adopción por parte de parejas del mismo sexo y que redefine los derechos de los niños y los abuelos, informaron las autoridades, aunque el porcentaje de rechazo fue inusualmente fuerte. La presidenta del Consejo Electoral Nacional, Alina Balseiro Gutiérrez, informó que según los resultados preliminares un 66,87% de los votos válidos –3.936.790- dijo que “Sí” a la nueva legislación mientras que un 33,13% -1.900.090- votó que “No”. Refirió que acudieron a las urnas el 74% de los poco más de ocho millones de isleños convocados en la jornada.
Se trata de una nueva norma de más de 400 artículos que toca por primera vez el tema de los derechos de las parejas homosexuales y la adopción, lo que ha generado polémica entre los cubanos. También contiene otros puntos novedosos como la legalización de la “gestación solidaria” -que permitiría a una mujer tener un hijo para otra persona sin fines de lucro-, la ampliación de los derechos de los abuelos para garantizar su comunicación o entregarles la “responsabilidad parental” de sus nietos, algo considerado vital en Cuba donde suelen convivir en un mismo hogar hasta cuatro generaciones y la emigración hace que muchos menores sean criados por los ancianos.
Recordar las condiciones y opresiones bajo las que vive Cuba; socialista por excelencia y controlador por muchos años. Este avance en el reconocimiento de todas las personas es un paso adelante. Tan solo recordar lo suscitado en nuestro país con la reciente aprobación del Matrimonio entre personas del mismo sexo en Durango, el pasado 19 de septiembre del 2022. Primer acto: Se sube a pleno del congreso del Durango a votación y entre argumentos deleznables para tirarlo argumentando que la coma no estaba en el lugar correcto; y otros de falta de socialización entre los durangueses se trató de bajar para su análisis más profundo (como si no supiéramos que son estrategias por demás desgastadas y continuas) Segundo acto: Sale desde el Gobierno de Durango un decreto en el cual y mediante el mismo, se prohíbe que cualquier registro civil rechácela celebración de matrimonio por orígenes étnicos, género o preferencia sexual. Tercer acto vuelve a subir el dictamen al congreso de Durango para su votación (después de haberles dado un estate quieto con el decreto desde el gobierno del estado de Durango) y con 15 votos a favor y 9 en contra se lleva a cabo la probación.
Actualmente son 28 estados de la República Mexicana que lo han aprobado en diferentes formas jurídicas. Tan solo nos falta el Estado de México, Guerrero, Tabasco y Tamaulipas. En otra ocasión hablaremos del porque este avance en los derechos humanos es importante… (sin moralidades)