Pues nada… “El reconocimiento legal del trabajo sexual debe partir de la complejidad de la realidad económica y situación laboral que la diversidad de las personas trabajadoras sexuales enfrenta, así como de la falta de igualdad de oportunidades en muchos casos. Por lo tanto, debe acompañarse del diseño e implementación de medidas alternas y paralelas para igualar las condiciones y opciones laborales para quienes, de manera voluntaria y consciente, decidan o no dejar de ejercerlo.” Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) 2020
Desde hace mucho tiempo se ha debatido en si es o no una actividad que necesite regularse de manera permanente. Es importante resaltar que, la criminalización y la discriminación aún presente hacia quienes ejercen el trabajo sexual, aunadas a la marginación y falta de acceso a la información, impiden el acceso a los beneficios de seguridad social que tienen otros trabajadores. Sin embargo, las personas que lo ejercen de manera organizada desde hace poco más de 7 años de manera consecutiva solicitan aplicaciones de pruebas rápidas de VIH, Sífilis y Hepatitis C. Lastimosamente, la Jurisdicción Sanitaria III que es quien debería respaldar estas actividades que son primordiales por ser un TEMA DE SALUD PUBLICA, pues simplemente han hecho caso omiso o como que no existen. Y aquí les explico: Desde hace años se cuenta con un aproximado de 80 Mujeres, 20 Mujeres Trans y 09 Masculinos que son los que de manera visible y publica ejercen esta actividad y de manera periódica o esporádica se realizan sus tamizajes para pruebas antes mencionadas. En muchas ocasiones se ha insistido a Salud Municipal de Cuautla (quien debería tener más disponibilidad para apoyarles) a solicitud de las interesadas a realizarse toma de Papanicolau (Procedimiento para el que se usa un cepillo pequeño con el fin de extraer con cuidado células de la superficie del cuello uterino y el área que lo rodea. Las células se examinan al microscopio para determinar si hay cáncer de cuello uterino o cambios celulares que a veces se vuelven cáncer. Una prueba de Papanicolaou también sirve para encontrar otras afecciones, como una infección o inflamación. A menudo se hace al mismo tiempo que un examen pélvico o una prueba para detectar ciertos tipos de virus del papiloma humano (VPH). Y estas peticiones a las áreas pues simplemente no han tenido intención y menos voluntad de realizarlas. Lo mas irrisorio es que en reuniones se les ha solicitado a Servicios de Salud les proporcionen mas insumos para su trabajo y la recomendación siempre ha sido que vayan a los Centros de Salud donde solo les dan dos tiras de 4 condones masculinos y si mencionan que son trabajadorxs sexuales la discriminación entra en modo activado y se les atiende con prejuicios.
Campañas específicas de algunos activistas de Sociedad Civil (ósea sin recursos ni apoyo de instituciones estatales o municipales) hacen de esta actividad una constante. Donde cada persona que ejerce el trabajo sexual acude en una hora y fecha establecida se realizan el tamizaje de las pruebas y se les entrega un kit de condones masculinos lubricante y condones femeninos. Hoy en día quienes trabajan están mas consientes sobre el uso de condón y la constante de aplicaciones de pruebas (aproximadamente cada dos meses) para estar en optimas condiciones para lo propio. Evidentemente, nunca será una actividad fácil de realizar por todo lo que conlleva, aunado a esto discriminación, pero muchas de estas personas son jefas de familia y mantienen padres, madres, hijos que estudian y dependen de la realización de ello. Sigamos exigiendo que sean más, las oportunidades sanitarias que lleguen para ellas y ellos, porque están en la mejor disponibilidad. EL TRABAJO SEXUAL ES TRABAJO. ..Hasta la próxima.
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