Hace más o menos mes y medio la Organización Mundial de la Salud reconoció la viruela símica como una emergencia de salud. Poco más de 50 mil casos, registrados en más 110 países del mundo. Países como Canadá, Estados Unidos y otros han iniciado una estrategia de vacunación a las poblaciones que mayormente se han visto afectadas por la transmisión de dicha viruela. En México; hay sí, mi México lindo y querido pareciera que no hemos aprendió las lecciones vividas recientemente con la pandemia de covid 19. No hay una estrategia de salud – ni se vislumbra que se exista en un futuro inmediato- es más, para acabar pronto no hay una declaración oficial reconociendo la viruela símica como una emergencia actual. Para empezar la opción de realizarse una prueba y poder ser diagnosticado de manera oportuna esta monopolizado, ya que el único autorizado a nivel nacional para dar casos confirmatorios es el “Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre)” y este se tarda en procesar e informar algo más, algo menos, de siete a catorce días… No pues wow.

Como en otros casos, la sociedad civil organizada, han hecho pronunciamientos y algunas estrategias para informar la realidad de las cifras- porque también se tienen otras cifras u otros datos-  La pasada semana nos reunimos en CDMX lideres gays de poco más de 21 países de Latinoamérica y el Caribe en la llamada Red GayLatino todo esto para hacer un llamado urgente a todos los gobiernos:

El resurgimiento de la viruela símica, también llamada viruela del mono o Monkeypox, fuera de las zonas endémicas en África, inició afectando y sigue afectando preponderantemente a hombres gay y bisexuales, ha sido declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una Emergencia de Salud Pública de Preocupación Internacional.

1.- A seguir el ejemplo de la OMS/OPS y decretar la emergencia por viruela símica en nuestros países;

2.- A notificar de manera transparente, la información epidemiológica de los casos de viruela símica de manera oportuna a los organismos de salud internacionales, y asumir su responsabilidad urgente de responder y contener el brote;

3.- A reconocer que -según la evidencia científica disponible- el contacto íntimo, particularmente el sexual, es la principal vía de transmisión, aunque también se reconozca que se puede transmitir de otras formas;

4.- A acercar y brindar información científica y basada en la evidencia, primordialmente a las poblaciones más afectadas;

5.- A que el diseño e implementación de programas de respuestas nacionales e internacionales a la emergencia por la viruela símica se acuerden con líderes y organizaciones gays y bisexuales;

6.- A incrementar y asegurar el acceso a la prueba diagnóstica temprana en hombres gays y bisexuales, con resultados confirmatorios expeditos;

7.- A capacitar y sensibilizar al personal de salud sobre viruela símica para el abordaje y atención sin prejuicios ni discriminación hacia hombres gay y bisexuales;

8.- A hacer de inmediato las previsiones presupuestales para comprar y adquirir de manera urgente las vacunas necesarias -ya aprobadas por agencias europeas y norteamericanas- y establecer una estrategia integral de prevención y vacunación;

9.- A garantizar los apoyos integrales necesarios para que las personas afectadas por la viruela símica puedan cumplir el aislamiento recomendado, garantizando la vigencia del marco de confidencialidad y Derechos Humanos;

10.- A reconocer como la población mayormente afectada y prioritaria, a la de hombres gay y bisexuales en todas sus circunstancias, para el acceso a vacunación contra la viruela símica, de acuerdo con los datos epidemiológicos;

11.- A implementar acciones contra el estigma, discriminación, maltrato y violencia al que están expuestos los hombres gays y bisexuales.

Urgen medidas claras, información asertiva y, sobre todo, urgen acciones de vacunación para todas las personas. Esperemos, creo, la pandemia por COVID19 nos ha dejado lecciones vividas que debemos tomar en cuenta, para el futuro.